Cuando era niña, no sé cuántas veces mi madre me dijo que no bizcara los ojos. “¡Se me quedarán así!”. ¿Tenía razón o solo estaba tratando de evitar la desagradable visión de mirarme bizca? Investigué un poco para intentar averiguar qué sucede. Esto es lo que encontré:
Los ojos están controlados por seis músculos que controlan el movimiento de los ojos, ya sea que los muevas hacia arriba, hacia abajo o de un lado a otro. Cuando cruzas los ojos, los músculos apuntan los ojos hacia adentro. Esto sucederá de manera natural si intentas mirar la punta de tu nariz con ambos ojos abiertos. Hacer esto durante períodos prolongados de tiempo puede causar tensión muscular, al igual que si mantuvieras las piernas en posición de sentadilla durante un período prolongado de tiempo. Entonces, ¿mi madre solo estaba tratando de hacerme dejar de hacerlo? Sí, no hay evidencia médica que sugiera que tus ojos permanecerán cruzados para siempre.
Sin embargo, existe una afección llamada estrabismo que indica que los ojos están permanentemente bizcos. El estrabismo se produce cuando hay un problema neurológico o anatómico que interfiere con la función de los 6 músculos que controlan los ojos. Los problemas pueden existir en los propios músculos o puede tratarse de un problema en el centro de la visión del cerebro. Por lo general, se trata de una afección hereditaria.
A veces, un padre puede notar que su hijo cruza los ojos para compensar la hipermetropía no corregida. Esto se llama estropía acomodativa y se corrige fácilmente con anteojos o lentes de contacto. Si nota que su hijo pequeño presenta estos síntomas, asegúrese de consultarlo con su médico. Doctor Tavel o uno de sus asociados certificados por la junta.
En definitiva, me enteré de una gran noticia: ¡no es posible que los ojos se queden cruzados por el simple hecho de cruzarlos durante largos períodos de tiempo! ¡Crucen, niños! ¡Crucen!